HEMATURIA COMO PRIMERA MANIFESTACIÓN DE UNA MALFORMACIÓN ARTERIOVENOSA (MAV) RENAL
Institución:Hospital Universitario Son Espases (Palma)
Tipo de presentación:Comunicación oral
Vega Vega, CA
Coello Tora, I
Aizpiri Antoñana, L
Aliaga Ayuni, C
Ladaria Sureda, L
Peraire Lores, M
Bauza Quetglas, JL
Pieras Ayala, E
INTRODUCCIÓN: La hematuria es un signo clínico que aparece en una gran variedad de patologías. En muchos pacientes no presenta mayor trascendencia, pero por el contrario, puede ser la primera manifestación de una enfermedad grave; por lo que es importante tener en cuenta los diagnósticos diferenciales al momento del estudio de un paciente con hematuria, tal como en el caso que se presenta.
PRESENTACIÓN DEL CASO: Mujer de 75 años con orina clara con coágulos y dolor en fosa renal. Hemodinámicamente estable, afebril, abdomen doloroso a la palpación renal bimanual derecha. En el estudio se obtuvo: hemoglobina de 13,1 gr/dl, creatinina de 0,83 mg/dl, TC- Urografía con coágulos en vía urinaria derecha y signos de uropatía obstructiva, sin identificar el origen del sangrado. Se orientó como tumor de vía urinaria alta y se decidió tratamiento conservador. Persistió con hematuria asociado a empeoramiento de función renal, por lo que se colocó nefrostomía urgente. Por persistencia de la hematuria anemizante, se realizó una angiografía que evidenció una malformación arteriovenosa (MAV). Se procedió a embolización selectiva de ramas arteriales que contribuían mayoritariamente a la MAV. La paciente presentó mejoría de la función renal, y estabilización de la hemoglobina. Desde el alta sin hematuria ni signos de repermeabilización de la MAV.
CONCLUSIONES: Las comunicaciones vasculares renales anómalas tienen una prevalencia baja, probablemente debido a un infradiagnóstico, al presentarse en su mayoría de manera asintomática. La presentación clínica puede ser diversa y la hematuria es la más frecuente. La técnica diagnóstica de elección es la Angiografía, que además ofrece la posibilidad de realizar acciones terapéuticas. El tratamiento endovascular es seguro, efectivo y poco invasivo, por lo que es, actualmente, el tratamiento de elección.